Todos sus predecesores se llamaron Guerlain. Pero él se llama Wasser. Sin embargo, el talento de Thierry Wasser va más allá de los vínculos de sangre y por ello fue elegido como digno sucesor de la casa perfumista más antigua del mundo.

Mirá la entrevista exclusiva que le hizo Lucía Ugarte en su visita a la Argentina:

EL HIJO ESPIRITUAL

Thierry Wasser es un creador inconfundible y poco convencional. Es un hombre sensible, refinado, elegante y encantador: el pragmatismo no va con él y es un auténtico “bon vivant”. Un hombre en contacto con la tierra, con el alma de un artesano, sin una pizca de ostentación. Su personalidad, combinada con su increíble capacidad olfativa, le han permitido convertirse en la quinta generación de perfumistas de la Maison.

EL ELEGIDO

Jean-Paul Guerlain le confió el libro secreto con las fórmulas que la familia ha transmitido de generación en generación. Además, le reveló todos los conocimientos y misterios de un patrimonio olfativo único en el mundo.

Cercano, entendedor, didáctico, comunicador: un valioso legado que solo un olfato privilegiado podía recibir.

Thierry Wasser se convirtió en la nueva nariz de Guerlain en 2008.

Posteriormente, se le encomendó que continuara la labor de sus ilustres predecesores sin poner trabas a su talento ni condicionar su impronta personal. Un desafío que superó en seguida creando Idylle, Habit Rouge l’Eau y Shalimar Parfums Inicial, reinterpretando el famoso Guerlinade para La Petite Robe Noire, y rindiendo homenaje a las mujeres a través de Mon Guerlain, la nueva fragancia imprescindible de la Maison francesa.