Por Inés Barrios

Carla Acosta es la artista detrás del emprendimiento de mates pintados a mano que llevo sus raíces argentinas y su pasión por el arte a embellecer el mundo.

Nació en  Santiago del Estero, Argentina y actualmente  vive en Miami junto con su familia y hoy conoceremos su emprendimiento de mates pintados a mano que son furor en Estados Unidos.

CG: ¿Cuál es el concepto de tu emprendimiento? 

C: Es una tienda virtual, cuya base es el Arte. En ella puedes encontrar  mates personalizados, pintados a mano por mí, es el fuerte de la tienda, en cada mate voy plasmando los deseos de la gente, el gusto de cada uno para darle su toque de personalidad.

Cada mate tiene  historias contadas, retratos, mascotas, clubes, y mis diseños propios, también alguna de mis obras de Arte reproducidas en un Mate.

Además del arte convencional, lienzos, óleos, acuarelas, acrílicos, me dedico al arte digital, un market muy variado para distintos gustos y público en general.

CG: ¿Cuándo nació esta idea? 

C: Es una poco larga la historia pero te lo voy a resumir, yo soy Artista autodidacta, pinto  en lienzo y me di cuenta que si lo hacía allí, también podía hacerlo en otras superficies. Comencé en 2018 a pintar pequeñas macetas de terracota, macetitas para cactus, con diferentes diseños coloridos, las exponía y vendía en diferentes ferias de arte de la ciudad.

Un día mientras preparaba los diseños, tomando mate como buena argentina que soy, se me ocurrió la idea de mezclar lo que me apasiona el arte  con otro de las cosas que más me gusta, el mate . Y ahí nació la idea de los mates pintados a mano. 

En ese momento, me perfeccioné tomando clases de  Arte, Pintura en óleo y acrílicos, en una escuela del condado de Broward. Cuando les comenté de mi idea a mi familia fueron los primeros en empujarme y animarme a darle forma a este emprendimiento, que finalmente nación como Minkay Art & Deco en 2019. 

CG: ¿Qué te motivó a emprender? 

C: La motivación a emprender es la misma que tengo día a día para crecer, tanto en lo personal como profesionalmente, mi motivación es el arte, yo tengo la certeza de que “Art heals”, que el arte sana, que el arte cura, que a través de él,  uno puede expresarse en sus más sinceras emociones y sentimientos.

Para mi pintar un lienzo, un cuadro, un retrato digital o un mate es mi cable a tierra. Me transporta a un mundo en el que disfruto tanto estar. El arte tiene ese misterio, que para los que lo disfrutamos como artistas, nos da el lugar para plasmar en cada obra aquello que a veces no se puede reproducir en el lenguaje común, y eso es lo que más me atrapa. 

Dentro de mis motivaciones, que mis obras ayuden a causas nobles como por ejemplo hacer subasta para recaudar fondos para Niños y Madres con HIV me emociona o que en un mall importante de South Florida esté mi arte en un banco, alegrando con colores el paisaje, también me motiva a seguir creando.

Al comienzo no fue tan fácil, porque muchas veces conseguir el producto “mate”, se me tornaba un poco complicado, luego la pandemia, que frenaba las importaciones, y hacía más lento todo. Pero eso me motivó a “aprender y experimentar más”, tanto así que comenzamos a producir nuestros propios mates. Montar nuestro taller con las maquinarias fue un desafío. 

Mi abuelo paterno  fue carpintero, tenía su propia carpintería y hacía los mejores muebles a medida. Su esposa, Mi abuela, profesora de Cocina y Repostería, una gran docente, que cuando no iba a la escuela preparaba las mejores tortas.

Mis abuelos maternos fueron sastre y chalequera, tenían su propia Sastrería, hacían trajes a medida,  trabajaban con tanta pasión y dedicación. Era todo un arte y oficio, y así crecí, admirando el trabajo, dedicación, la pasión y el esfuerzo que ponían en sus obras de arte.  Y eso lo adquirí, lo heredé  de ambas partes de mi familia, llevo el arte y el ser emprendedor en la sangre. 

Mis raíces fueron emprendedoras, hace muchos años aún cuando este concepto ni siquiera estaba asimilado como en la actualidad.

Entonces nada me detuvo, corté maderas, diseñé  modelos, pasé la prueba y error, y aunque muchas veces las cosas no salían como quería, seguí intentado una y otra vez,  y así seguí en camino.

Nunca me di por vencida, y soy una convencida de que si tenemos sueños debemos ir por ellos. Y cada mate, o cada producto intervenido con mi arte se llevan un pedacito de mí, de mi corazón, de mi dedicación y entusiasmo que vuelco cada vez que pongo a volar mi imaginación y echar manos a la obra. 

CG: ¿Por qué Miami? 

C: Vivir en esta hermosa ciudad es una inspiración constante, desde su arquitectura con esos edificios sublimes, hasta el mar transparente con sus playas alucinantes, los paisajes de los parques con su verde y con sus lagos, los canales con los barcos, las marinas, la brisa con aroma a mar, te mantienen en estado de admiración constante, desde un amanecer con el sol asomando hasta su caída sobre la lejanía Del Mar. 

A mi Miami me fascina, todo el tiempo me admiro de los mismos lugares, como el primer día. 

Sus distintas facetas, desde lo arquitectónico hasta lo natural, el arte urbano, los museos, las ferias y eventos de arte crean postales en nuestras retinas que se vuelven inolvidables, son mi inspiración.

Y pensar que en un mate puedo reflejar mi arte, me genera una dicha enorme, saber que tanta gente me elige no solo por el plus de personalizar una idea que tienen en mente,  sino de que me eligen para tener un pedacito de mis obras en ellos es gratificante. 

Mis mates no solo llegaron a los lugares más lejanos de USA, como Alaska por ejemplo, sino que también se fueron al otro lado del charco, como Ibiza, también viajaron a Argentina, mis mates y mi arte conectan sentimientos y crean lazos entre quienes los piden y los reciben y eso es lo que más contento me da.

Además no solo argentinos, uruguayos o brasileños que vendríamos a ser el común denominador en la ingesta de la yerba mate, sino gente de diferentes nacionalidades (diferentes pose latinos y aunque parezca increíble, tengo hasta gente asiática que toma mate). 

Lo que más rescato de todo esto es que con cada uno fui creando una especie de amistad virtual, nos escribimos , me consultan sobre cómo tomar mate, trucos para saborizar la yerba y otras cosas más, nos intercambiamos nuestra cultura, además de siempre comentarme que quedaron encantados con la obra que les hice. 

Una vez recibí en el correo 3 kg de yerba mate con una tarjeta de agradecimiento por el mate que había pintado, y esos detalles, te confieso que te estrujan el corazón, saber que hiciste feliz a alguien con algo pintado mano por vos es la felicidad misma. 

CG: ¿Cómo es ser Tu Propia Jefa? 

C: Es la mejor decisión que puedes tomar. Siempre querrás ir más allá, progresar, instruirte, perfeccionarte, superarte día a día en lo que haces. 

Además el hecho de manejar tus tiempos ya es un punto extra a tu favor, pero a l vez es un auto exigencia constante, pero una exigencia que te hará crecer, siempre quieres aprender más sobre tu labor, quieres estudiar, investigar, ser la mejor en lo que haces.  

Constantemente estoy aprendiendo, el saber no ocupa lugar, me gusta aprender y aprehender, por ejemplo  hace poco terminé un curso de Arte Terapia, me gusta adquirir conocimiento todo el tiempo sobre lo que Hago, para dar lo mejor de mí. 

CG: ¿Un deseo para todas esas mujeres emprendedoras?

C: Deseo que cada una de ustedes que está comenzando este camino de emprender, tenga la fuerza y la convicción de seguir para adelante, nunca nada es fácil pero tampoco imposible, si tienes ganas de ser tu propia jefa, haciendo lo que te gusta, hacelo, instruirte, prepárate, ponete objetivos a corto y largo plazo, ve por ellos, rodéate de gente que te inspire, que te empuje, que una vez que te decides a emprender, aunque haya mil piedras en el camino, los tropezones que puedan surgir que sean para impulsarte a buscar una solución, y a seguir firme en tu objetivo, déjate guiar por tus instintos, por tus convicciones, que  cuando algo te apasione, nada te frene, sino que te impulse a ir por más.

Y voy a usar una frase que aunque un poco trillada es motivadora, cuando te va en mente algo: “DESEALO TANTO, TANTO, QUE EL UNIVERSO Y LA VIDA NO TENGAN MÁS REMEDIO QUE DÁRTELO”.