Mujeres de todo el mundo alzan su voz por las miles de mujeres y niñas silenciadas en Afganistán
Por: Inés Barrios
El régimen Talibán logro el control de Afganistán en apenas solo unas semanas, después de que Joe Biden presidente de Estados Unidos decidiera retirar la totalidad de las tropas militares del país Asiático. Mientras los talibanes toman el poder de Afganistán, millones de niñas y mujeres afganas son aterrorizadas y temen por sus vidas, la incertidumbre de que les depara el destino en manos de un régimen que impone severas medidas de sumisión para las mujeres crece con el correr de las horas.
Quedan atrás los pocos derechos adquiridos durante la ocupación militar estadounidense y sus aliados de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), pero esos vínculos ya no existen y la comunidad internacional está ausente en el momento en que más se necesita. Estas mujeres buscan desesperadamente ayuda para sobrevivir a las leyes que se les impone por el simple hecho de haber nacido mujer en un territorio en donde su voz es silenciada con pena de muerte.
¿Quiénes son los talibanes?
Los talibanes son un movimiento político religioso extremista que nació a mediados del siglo XX en Pakistán como un movimiento de estudiantes islamistas ultraconservadores. Han sido cuna de Al Qaeda, de Estado Islámico. En la actualidad, los talibanes de Afganistán se constituyen como un emirato asambleario en el que impera la ‘sharia’, la ley islámica.
La última vez que gobernaron eliminaron todos los derechos de las mujeres y niñas y volvieron las ejecuciones públicas.
La sharía o ley islámica es la base del polémico código penal y forma parte de la fe surgida del Corán y los dichos y acciones del profeta Mahoma. Su aplicación en la actualidad es objeto de disputa entre musulmanes conservadores y liberales
Castiga el adulterio y el sexo homosexual con muerte por lapidación e impone la sumisión a la mujer a manos de los hombres.
Los Talibanes ejercieron una brutal interpretación de la sharía durante su etapa en el poder (1996-2001) Este régimen que aterroriza a mujeres y niñas de la región impone una serie de “reglas” que estremecen, El total control sobre la vida de las mujeres es lo que alertan diferentes organismos de derechos humanos.
Estas son las 29 leyes impuestas por el régimen Talibán sobre las mujeres afganas
- Completa prohibición del trabajo femenino fuera de sus hogares. Sólo unas pocas doctoras y enfermeras tienen permitido trabajar en algunos hospitales.
- Completa prohibición de cualquier tipo de actividad de las mujeres fuera de casa a no ser que estén acompañadas de su ‘mahram’ (parentesco cercano masculino como padre, hermano o marido).
- Prohibición de cerrar tratos con comerciantes masculinos.
- Prohibición de ser tratadas por doctores masculinos.
- Prohibición de estudiar en escuelas, universidades o cualquier otra institución educativa (los talibán han convertido las escuelas para chicas en seminarios religiosos).
- Las mujeres han de llevar burka, que las cubre de la cabeza a los pies.
- Azotes, palizas y abusos verbales contra las mujeres que no vistan acorde con las reglas talibán o contra las mujeres que no vayan acompañadas de su ‘mahram’.
- Azotes en público contra aquellas mujeres que no oculten sus tobillos.
- Lapidación pública contra las mujeres acusadas de mantener relaciones sexuales fuera del matrimonio.
- 10.Prohibición del uso de maquillaje.
- 11.Prohibición de hablar o estrechar las manos a varones que no sean su ‘mahram’.
- 12.Prohibición de reír en voz alta.
- 13.Prohibición de llevar zapatos de tacón, que pueden producir sonido al caminar (un varón no puede oir los pasos de una mujer).
- 14.Prohibición de montar en taxi sin su ‘mahram’.
- 15.Prohibición de tener presencia en la radio, la televisión o reuniones públicas de cualquier tipo.
- 16.Prohibición de practicar deportes o entrar en cualquier centro o club deportivo.
- 17.Prohibición de montar en bicicleta o motocicletas, aunque sea con sus ‘mahram’.
- 18.Prohibición de llevar indumentarias de colores vistosos. En términos de los talibán, se trata de “colores sexualmente atractivos”.
- 19.Prohibición de reunirse con motivo de festividades o con propósitos recreativos.
- 20.Prohibición de lavar ropa en los ríos o plazas públicas.
- 21.Modificación de toda la nomenclatura de calles y plazas que incluyan la palabra “mujer.”
- 22.Prohibición a las mujeres de asomarse a los balcones de sus pisos o casas.
- 23.Opacidad obligatoria de todas las ventanas, para que las mujeres para que las mujeres no puedan ser vistas desde fuera de sus hogares.
- 24.Prohibición a los sastres de tomar medidas a las mujeres y coser ropa femenina.
- 25.Prohibición del acceso de las mujeres a los baños públicos.
- 26.Prohibición a las mujeres y a los hombres de viajar en el mismo autobús. Los autobuses se dividen ahora en “sólo hombres” o “sólo mujeres”.
- 27.Prohibición de pantalones acampanados, aunque se lleven bajo el burka.
- 28.Prohibición de fotografiar a mujeres.
- 29.Prohibición de la existencia de imágenes de mujeres impresas en revistas y libros, o colgadas en los muros de casas y tiendas.
Las mujeres que no cumplen con las leyes impuestas por el mandato Talibán son penalizadas de manera arbitraria en lugares públicos, como plazas o centros de reunión, estas son azotadas, golpeadas y expuestas públicamente sin ningún reparo a torturas medievales como el apedreamiento y la pena de muerte. El exponer a la figura femenina desprovista de todo socorro en un estado pleno de vulnerabilidad, es parte adoctrinamiento impuesto por el régimen.
El activismo femenino pronunciándose en contra del régimen Talibán es considerado como traición y es castigado con la pena de muerte tanto para la mujer como para el resto de su familia.
Activistas por los derechos humanos se pronuncian para darles voz a las mujeres silenciadas en Afganistán
“Nunca había sentido tanta impotencia al querer ayudar a estas mujeres a las que tuve el privilegio de conocer. Pero no es una opción dejar de intentar sacarlas del peligro para que vuelvan a un camino en el que puedan perseguir sus sueños.”
He pasado años escribiendo sobre el liderazgo de las mujeres afganas en el movimiento para que sus voces sean escuchadas. Me refiero a niñas que aprenden a programar, mujeres que inician negocios, chicas que sueñan con convertirse en ingenieras, abogadas y maestras, entre otras. Sus historias, repletas de fortaleza y esperanza, ahora corren el peligro de ser aplastadas por los talibanes, como sucedió con tantas cuando los talibanes gobernaron la última vez. Los mensajes que he recibido en los últimos días han sido desgarradores. A continuación, una muestra de algunos de ellos. He omitido las identidades de las mujeres debido al peligro que sienten en la actualidad, en la que los testimonios sobre la violencia talibán contra las niñas y mujeres están resurgiendo.”
Relatos que estremecen
De una mujer de unos 20 años en Kabul:
“Como sabes, la situación de seguridad en Afganistán se deteriora día a día y estamos muy preocupadas y ansiosas. Mi hermana y yo… estamos preocupadas por nuestras vidas. Estamos en una situación muy peligrosa. Alguna vez me comentaste que si quería ir a Estados Unidos a estudiar podrías ayudarme… en esta horrible situación, si pudieras ayudarnos sería una enorme amabilidad y grandeza de tu parte. Espero tu respuesta”.
De una estudiante de secundaria que logró huir por la frontera, sola, para escapar de las amenazas de los talibanes, pero teme por sus padres: “No te puedes ni imaginar lo peligrosos que han sido estos últimos días… Tenemos mucho miedo porque estamos solas y no tenemos a nadie, y estamos muy nerviosas por nuestras familias, hemos estado llorando todo el día, sin saber qué hacer con nuestras familias. Solo le pedimos a la gente que nos ayude”.
Una mujer joven que conozco fue a visitar algunos campamentos improvisados en parques de Kabul llenos de miles de familias que ya habían huido de los ataques talibanes en el norte de Afganistán. Las familias están sentadas, ofuscadas, esperando lo que venga. Me compartió algo que le dijo una joven:
“Las jóvenes que tenían deberes fuera de la casa corren mayor riesgo, porque los talibanes las reconocen y luego las castigan. Te preguntan que qué haces trabajando fuera de tu casa si eres musulmana… Mi hermana y yo tenemos miedo por nosotras y por nuestra familia, hemos trabajado por muchos años”.
Mi amiga me escribió: “No son solo una o dos niñas. Hay demasiadas personas con la misma historia trágica. Haré lo que sea por mi pueblo, quiero que el mundo nos escuche, que sienta nuestro dolor”.
Otra joven me envió un video de un padre con las manos en la cabeza, diciéndole a un periodista que no tenía idea de dónde estaba su hija de 14 años, luego de que varios hombres armados se la llevaron. La joven que me envió el video teme que esto le suceda a ella.
De una activista comunitaria: “Acabo de recibir una llamada aconsejándome salir inmediatamente de Kabul con mi familia. El gobierno me llamó y me dijo que estaba en la mira y por ende, corría peligro. ¿Qué debo hacer con mi familia? Mi país se está cayendo en pedazos. No sé qué hacer con mi familia”.
Los relatos y las imágenes de miles de mujeres, niñas y adolescentes vulneradas bajo este régimen dictatorial generan indignación e incertidumbre en cuanto al futuro que les espera bajo estas leyes deshumanizadas: Azotes, violaciones, violencia doméstica, muertes de niñas madres al gestar embarazos cuando sus cuerpos aún no han terminado de desarrollarse, son solo algunas de las aberraciones en el historial talibán. Desde la redacción de Chicas Guapas TV reafirmamos nuestro compromiso por la lucha de los derechos de las mujeres en todo el mundo y nos comprometemos a compartir los testimonios de las activistas que se pronuncian por las que hoy no tienen voz. Es de vital importancia que visibilicemos las penosas circunstancias que atraviesan mujeres y nenas que han tenido que renunciar a estudiar, trabajar o incluso mostrar su rostro bajo la amenaza constante de muerte por parte del régimen talibán. El transformar el miedo por la esperanza de que puedan volver a recuperar los derechos arrebatados es una lucha de todas.
Esperamos tu opinión en cuanto a esta problemática y te invitamos a acompañarnos difundiendo la nota hasta que los organismos de derechos humanos en su totalidad se pronuncien a favor de la ayuda humanitaria en Afganistán.